5 destinos para viajar con niños

Lourdes, Vincent y la pequeña Avril son una familia viajera que ha viajado sin parar desde que esta última vino al mundo. Realizaron su primer viaje cuando tan solo tenía dos meses y medio y desde ahí han abordado todo tipo de destinos. 

Comparten todas estas experiencias a través de su blog Viajandodo y acaban de publicar la Guía para viajar con tu bebé (Ed. Aurum Volatile) en el cual brindan todos los consejos necesarios para que otras familias no tengan que renunciar a la pasión de viajar por el hecho de convertirse en padres.

Ahora están esperando otro bebé y deseando que éste nazca ¡para proseguir con sus aventuras a cuatro!

No tengo una respuesta cerrada a cuando nos preguntan qué fue lo que nos motivó a empezar a viajar en familia. Vincent y yo viajábamos bastante desde que nos conocimos y en pleno apogeo viajero nos enteramos, sin haberlo planificarlo, que estábamos ‘embarazados’. 

Supongo que fueron esas ganas incesantes de viajar lo que nos motivó a no renunciar a ello por el simple hecho de ahora tener un bebé. Y un viaje tras otro aprendimos a organizarnos cada vez mejor. No obstante, de lo que realmente nos dimos cuenta es que, a pesar de los cambios que implica el convertirse en padres, es más que posible abordar diferentes destinos con bebés y niños.

El ritmo del viaje cambia, por supuesto, pero no es algo que deba desmotivar. Todo lo contrario. Uno aprende a disfrutar de una manera más relajada, a planificar mucho e improvisar al mismo tiempo, a ser más paciente y, sobre todo, a redescubrir las maravillas del mundo a través de sus ojos.

Nosotros, al menos, hemos tenido oportunidad de realizar todo tipo de planes y abordar destinaciones muy variadas con nuestra pequeña y por ello queremos compartiros aquí algunas de ellas:

5 destinos para viajar con niños

Nueva York

Aunque os parezca mentira, este fue el primer destino transoceánico de Avril con tan solo cuatro meses y medio. A pesar de organizar bien el viaje y sus itinerarios, aún nos quedaban dudas de si sería un destino adecuado para viajar con niños pequeños o bebés. Sin embargo, Nueva York nos sorprendió positivamente en este sentido.

Se trata de una ciudad muy grande pero al mismo tiempo muy bien comunicada en metro, algo que facilita los desplazamientos. Y si aun así, aunque el metro de New York resulta algo caótico, siempre habrá alguien dispuesto a ayudar. Y es que, los newyorkinos son, más serviciales y educados de lo que podríamos haber imaginado. Por ejemplo, en todas las tiendas, siempre había alguien que me habría la puerta para que pudiera entrar más fácilmente con el carrito.

Otra de las ventajas que tiene esta ciudad en familia es la cantidad de parques y monumentos aptos para todos los públicos. La visita de Central Park es ideal para pasar media jornada relajada en familia ya que combina naturaleza con unas vistas impresionantes a los rascacielos. Otras que disfrutamos mucho fueron la visita a la Estatua de la Libertad y el museo de Historia Natural.

Y no solo eso, estando en Nueva York se puede viajar a otros lugares del mundo a través de su famosos barrios Chino o el Italiano.

Si lo que te preocupa es la comida a la hora de viajar, en Nueva York encontramos alimento apto para bebés en muchos supermercados y la gastronomía es tan variada y adaptada a todo tipo de bolsillos, que es complicado no encontrar un restaurante que contente a toda la familia. 

Lo que es seguro es que Nueva York es una ciudad donde resulta imposible aburrirse con los más pequeños de la casa.

Islas Griegas

La isla griega de Rodas fue el primer destino veraniego que elegimos con Avril a sus diez meses y la verdad es que lo disfrutamos mucho. 

Dentro de todo el conjunto de islas tan bonitas que alberga Grecia, Rodas nos pareció una buena opción. Íbamos en pleno agosto y por lo que pudimos informarnos no suele estar tan masificada como algunas de sus vecinas.

Nos alojamos en la zona de Stegna, en un apartamento a pie de playa y con todas las comodidades cerca (restaurantes, chiringuitos, supermercado), donde podíamos alquilar paddle surf, barcos y hamacas. Todo ello junto una playa de arena blanca y aguas cristalinas sin oleaje.

Avril dio sus primeros pasos en esta playa del mediterráneo. Por otra parte, alquilamos un coche y recorrimos diferentes lugares de la isla como la preciosa y ambientada ciudad de Rodas, el Valle de las Mariposas, una granja de abejas, los manantiales de Kalithea, algunas playas muy conocidas como la de Anthony Quinn u otra ideal con peques como la Nikolas Beach y los siete manantiales o Epta Piges, entre otros.

Marruecos

Son muchos los que aún dudan sobre si Marruecos es un buen destino para viajar con niños y, tras nuestra experiencia, podemos decir que es uno de los destinos más family friendly que hemos visitado.

De hecho, tuvimos la oportunidad de descubrir las ciudades de Fez y Chefchaouen, en la zona norte, con nuestra pequeña a sus catorce meses. Desde que pusimos los pies en el aeropuerto, no pararon de decirle cosas bonitas y abrazarla durante todo el viaje. Nos sentimos muy bien acogidos en este país por el simple hecho de viajar en familia y ello nos motiva mucho a volver.

Encontramos comida para ella sin problema en cualquier supermercado o almacén, por no deciros que hay puestos que venden pañales hasta ‘a la unidad’. Al mismo tiempo la cultura marroquí es digna de ser descubierta por pequeños y grandes, y es que cada medina y sus calles guardan aún su propia esencia.

Hablando de gastronomía, recordamos que a Avril le encanto tanto comer tajines que cuando volvió de este viaje ya no quiso ni una papilla mas… Además, siempre es posible pedir que no pongan muchas especias ni para ellos ni para nosotros. De todas maneras, en las principales ciudades de Marruecos, se encuentra tanto comida tradicional como todo tipo de platos internacionales incluso fast food.

Nosotros alquilamos de nuevo un coche para ir desde Fez a Chauen y entre la magia de cada ciudad, los paisajes que descubrimos por el camino y la gran acogida de su gente, es algo que recomendamos vivir a cualquier familia.

París

Cuando Avril tenía diecisiete meses decidimos ir con los abuelos a París. Teniendo en cuenta que mi padre sufre de algunas limitaciones físicas y que íbamos con un bebé, decidimos contratar el autobús turístico para facilitar las visitas a los principales puntos de la ciudad. Fue todo un acierto. Podíamos subir y bajar las veces que queríamos durante el día en las paradas establecidas y visitábamos lo que se nos iba apeteciendo.

París es una ciudad preciosa pero como una de las principales capitales europeas es bastante grande y no todos los monumentos ni barrios importantes están siempre cerca. Por lo que es preciso organizarse bien en este sentido, sobre todo con niños.

Al mismo tiempo, es una ciudad en la que cuesta aburrirse teniendo en cuenta todo lo que ofrece: la famosa Torre Eiffel, el Louvre y sus alrededores, los jardines de Luxemburgo, los Campos de Marte, Montmartre, le Moulin Rouge, el Museo de Cera, Versailles, Disneyland Paris… Hay tanto por ver y hacer que seguro que encontráis planes ideales para contentar a toda la familia, por lo que es un destino ideal para viajar con niños.

Albania

Muchos se echaron las manos a la cabeza cuando dijimos que nos íbamos a Albania con una bebé de 22 meses. Y lo que no sabían es que Albania es a día de hoy tan seguro como cualquier otro país del mediterráneo. 

Tuvimos oportunidad de hacer un road trip por todo el país durante dos semanas y fue una de nuestras mejores experiencias de viaje. Albania nos sorprendió con ciudades históricas como Gjirokastër o Berat, con playas que ni las de postal como la zona de Ksamil, al sur, o la de Himarë. Con parques arqueológicos como el de Butrinto y con lugares increíbles como Porto Palermo. Y eso que aún nos quedaron cosas por conocer como los lagos de Skodër y Ohrid.

Comimos mejor en la zona interior que por la costa ya que en la misma los restaurantes están demasiado orientados al turismo italiano y griego. No obstante, Albania es un país genial a descubrir en familia. Sus dimensiones no son tan grandes y está bastante bien comunicado para hacerlo en coche o caravana. 

Nosotros recordamos este destino con gran cariño y esperamos tener oportunidad de volver a la zona de los Balcanes….¡Aunque esta vez será a cuatro con el bebé que viene en camino!

Antes de hacer cualquier viaje con bebés y niños recomendamos analizar el destino con sus pros y sus contras. Organizarlo con tiempo y hacer itinerarios relajados y adaptados a toda la familia. De esta manera, será complicado no poder disfrutar de la experiencia con ellos. Y, por supuesto, contratar un seguro médico internacional con una buena cobertura de viaje para toda la familia.